¡Ella es una cÃnica irremediable! ¡Ã‰l es tan sólo una ardilla! Juntos, Flora y Ulises, vencerán a los villanos, defenderán a los indefensos y protegerán a los débiles. O algo asÃ.
Esta historia comienza como las mejores historias de superhéroes, con un trágico accidente que tiene consecuencias inesperadas. La ardilla no vio cómo la aspiradora se le echó encima, pero Flora Belle Buckman, que ha leÃdo todos los ejemplares del cómic ¡Cosas terribles que pueden sucederte a ti!, es la persona más preparada para salvarle. Lo que nadie podÃa imaginar es que Ulises —la ardilla— volverÃa a la vida con superpoderes: ahora vuela, tiene una fuerza prodigiosa, y escribe poesÃa —aunque con faltas ortográficas—.
Una hilarante historia sobre la amistad, la esperanza, el amor y la grasa de foca.
Gracias a Editorial Océano por el ejemplar.
Datos
TÃtulo: Flora y Ulises. Las aventuras iluminadas.Autor: Kate DiCamillo
Editorial: Gran TravesÃa
N° de Páginas: 231
Opinión
Miento si digo que alguna vez leà mucho sobre esta historia. Si habÃa oÃdo su nombre y era un tÃtulo que aparecÃa con frecuencia en mi inicio en Goodreads, conocÃa muy por arriba de qué trataba pero jamás me preocupé por conocer a fondo su argumento. Soy una de esas convencidas que creen que las cosas pasan por algo y el nunca haber leÃdo demasiado sobre este libro influyó muchÃsimo en mi lectura.
Flora y Ulises sigue de cerca las aventuras de estos dos personajes tan peculiares, de esta dupla invencible. Para empezar… ¿Quiénes son Flora y Ulises? Flora es una nena en pleno crecimiento, en ese momento bisagra entre la niñez y la pubertad, en esa etapa desgastante; una nena que creció junto a unos padres un poco peculiares y con la convicción de que es una cÃnica. Al principio me resultó chocante ese aura de "única y diferente" que la autora le estaba otorgando pero con el paso del tiempo Flora demuestra que sólo es una coraza y conocer a la verdadera es algo maravilloso. Ulises es una ardilla. No. Mejor dicho es un sobreviviente. No puedo describir con pocas palabras el cariño que le tengo a una simple ardilla ficticia. Me llena el corazón ese pequeñito. Quiero abrazarlo. Es un personaje que se hace querer.
Nuestros protagonistas se conocerán, como todos los grandes héroes, gracias a una desventura, a un imprevisto y, como todas las grandes duplas, se harán inseparables.
Si tuviera que describir con una sola palabra esta historia, seguramente dirÃa que fue una lectura fresca. Fue una lectura de dÃa y medio que tranquilamente podrÃa haberse reducido a uno sólo. No es una historia pretenciosa, claro está, ya que sus destinatarios podrÃan ser niños de la misma edad que la protagonista –y por qué no niños como yo, que ya pasamos esa etapa hace largo rato-. Ese dato es algo que no se puede perder de vista para no aburrirse ni creer que esta historia es demasiado blanda.
Narrado en tercera persona, Flora y Ulises, cuenta con algunas ilustraciones y varias viñetas asà como también esta edición hace cambios pertinentes en la tipografÃa de acuerdo a distintas situaciones, tÃtulos, etc. Es una lectura divertida que complementa todos los recursos gráficos posibles.
Quiero tomarme un rato para hablar de varios personajes y de su importancia. Para arrancar, tenemos a la madre de Flora. Una mujer un tanto excéntrica, escritora de novelas románticas exitosas al mejor estilo Nora Roberts pero que en la vida real, en materia de tacto y sensibilidad en las relaciones va un poco mal. Debo decir que es un personaje muy importante y que, si bien al principio me generó muchÃsimo rechazo, logré aceptarla con el paso de las páginas.
Por otro lado tenemos al padre de Flora, un hombre desganado, el tÃpico hombre que perdió el rumbo y que olvidó cuáles son las buenas cosas de la vida. Me encariñé muchÃsimo con él y su aparición en la historia es tan relevante como la de los mismÃsimos protagonistas.
También está William Spiver, el sobrino nieto de la vecina de Flora. No puedo describir fácilmente lo que me generó este personaje. Cada tanto querÃa que cerrara el pico, que dejara de hablar e interrumpir en momentos clave pero luego aprendà a quererlo. William Spiver es un tÃpico personaje que con diez años más uno puede cruzarse en una facultad de Humanidades, ese tipo de persona que no se conforma con lo que lee y busca explicaciones por sà mismo. Pero no está solo. La doctora Meescham, la vecina del padre de Flora es un personaje de la misma Ãndole. En varias situaciones deseé tener una vecina como ella para instalarme a hablar de la vida, de su vida en su pueblo natal y sobre los trols.
A pesar de tener una narración excesivamente lineal –los saltos en el tiempo son prácticamente nulos-, esta historia logró mantenerme atrapada desde el principio al fin. Quizás necesitaba este tipo de lectura, reafirmar mi pasión por las cosas sencillas y hermosas. Tal vez otro dÃa les hable con más detalles –y con spoilers, lo lamento- sobre esta historia porque siento que tiene muchÃsima tela para cortar.
Para cerrar, quiero decirles que tengan siempre presente que no todos los héroes usan capa… Algunos saben usar una máquina de escribir. Y tienen hambre. Mucha hambre.
Calificación:
Historia: 4/5
Trama: 4/5
Narración: 3/5
Personajes principales: 4/5
Personajes secundarios: 4/5
Portada: 4/5
¿Reincidencia?: Seguramente.