Buenas tardes a todos. Hoy es un dÃa muy especial. Es el cumpleaños de mi autora favorita, la que me hizo amar las letras, la que indirectamente guió mi camino hasta donde estoy hoy. Hace dos años que ya no está entre nosotros, es una pérdida que me afectó y me dolió muchÃsimo. Es por eso que hoy voy a dedicar esta entrada para contarles mejor sobre ella, sus obras y hacer desde mi humilde lugar, un pequeño homenaje a esta mujer que me robó más de una sonrisa durante tantos años.
Elsa Isabel Bornemann fue una escritora de cuentos, canciones, novelas y piezas teatrales para niños y jóvenes. Se graduó como profesora en Letras en la Universidad Nacional de Buenos Aires.
Durante la última dictadura militar que gobernó Argentina, autodenominada Proceso de Reorganización Nacional, su libro "Un elefante ocupa mucho espacio" fue censurado y pasó a integrar la lista de autores prohibidos. Ese mismo libro integró la Lista de Honor de IBBY (International Board on Books for Young People). Más tarde, sus libros El último mago o BilembambudÃn y Disparatario fueron seleccionados para integrar la lista The White Ravens, distinción que otorga la Internationale Jugendbibliothek de Múnich, Alemania.
Ha realizado numerosos cursos y talleres sobre literatura con su profesor Manuel Kedes tanto en Argentina como en otros paÃses de América, de Europa y Japón. Muchas de sus obras han sido reproducidas en libros de lectura para la escuela primaria, en manuales de Literatura para distintos niveles, y en antologÃas argentinas y del exterior.
Cuando tenÃa siete años, mi mamá me leyó un cuento. Fue una experiencia única e irrepetible. Si bien todas las noches me contaba cuentos, esa noche sé que mi vida cambió para siempre. Me contó quién era la autora -como siempre lo hacÃa cuando me leÃa cuentos de autores anónimos- y me contó que el libro que contenÃa ese cuento habÃa estado prohibido muchos años y que con el tiempo iba a entender el por qué. Siempre habÃa encontrado placer en oÃr las historias que mi mamá me leÃa pero repito, esa noche ese cuento me atrapó, me perdà en la historia y me sentà completa, feliz.
Ese cuento se llamaba Cuento con Caricia. Un hermoso relato sobre el cariño, el amor y la amistad, sobre aceptar las diferencias porque eso nos hace únicos y sobre aceptar el amor que nos brindan los demás. Pasé años leyendo y releyendo esa historia, porque sé que esa historia fue el principio de algo hermoso, de un camino que me trajo hasta acá y que tal vez, me lleve aún más lejos.
No sabÃa lo que era una caricia. Nunca lo habÃan acariciado antes. Por eso, cuando el changuito rozó su plumaje junto a la laguna –alisándoselo suavemente con la mano–, el tero se voló. Su alegrÃa era tanta que necesitaba todo el aire para desparramarla.
–¡Teru! ¡Teru! ¡Teru! ¡Teru! ¡Teru! ¡Teru! –se alejó chillando. El changuito lo vio desaparecer, sorprendido. La tarde se quedó sentada a su lado sin entender nada.
Con el tiempo me fui animando a leer sola, sin la ayuda de nadie y para empezar, decidà leer El Niño Envuelto, el primer libro con el que me sentà identificada. Experimenté por primera vez esa sensación hermosa que significa encontrar un libro que parece escrito directamente para vos. Una sensación única, tan especial. Andrés, el protagonista de esta historia, nos cuenta las experiencias que van marcando su vida: La escuela, el mundo de los adultos, los primeros interrogantes y los secretos del corazón se develan a lo largo de anécdotas, cuentos, canciones y mensajes ultrasecretos, especiales para lectores curiosos.
Lo que siempre amé de Elsi fue su forma particular de narrar las historias. La mayorÃa comienzan con un narrador omnisciente que luego termina siendo testigo y ese testigo termina siendo ella, contando acerca de esos personajes hermosos que terminan enamorándonos.
Con el paso del tiempo empecé a buscar cuentos más maduros pero siempre de su autorÃa. Fue asà como di con No Somos Irrompibles. Se puede decir que fue el primer libro romántico, de amor y tristeza que leÃ. Enfrenté las primeras tristezas literarias junto a sus maravillosos cuentos.
Los cristales pueden quebrarse.Elsi fue una autora muy importante para mÃ. Gracias a sus cuentos maravillosos me inicié en este hermoso mundo de la lectura. Poco a poco sus cuentos guiaron mis pasos, me hicieron llegar hasta donde estoy: A este blog, a mi futura carrera. Hoy fue un dÃa importante para mÃ. Es su cumpleaños y justamente hoy me inscribà en la carrera de Letras. Creo en las conexiones y en las circunstancias del destino. Lo de hoy fue sin dudas algo hermoso, una especie de señal. Elsi fue muy importante en mi infancia y lo seguirá siendo por siempre, crecà con sus cuentos y sus poesÃas.
A veces, basta un leve golpe de abanico.
Las telas suelen desgarrarse al contacto de una diminuta astilla.
Se rasgan los papeles...
Se rompen los plásticos...
Se rajan las maderas...
Hasta las paredes se agrietan, tan firmes y sólidas como parecen.
¿Y nosotros?
Ah... Nosotros tampoco somos irrompibles.
Si nunca leyeron nada de Elsi, no pierdan el tiempo y lean algo ya. No importa la edad que tengan, ni la edad recomendada de sus cuentos. Lean sus obras. Si tienen hermanos, primos, etc. léanlos con ellos.
Elsa va estar siempre en el corazón de todos sus lectores.