Todo comienza con un trabajo para la clase de Literatura: escribir una carta a una persona muerta. Laurel decide escribirle a Kurt Cobain, quien murió joven como May, su hermana. Luego de la primera carta, ya no puede detenerse, y escribirá otras a Janis Joplin, Amy Winehouse, Jim Morrison y Heath Ledger, entre otros personajes famosos. Sin embargo, no le entrega ninguna a su profesora. La tarea permanece oculta… como tantas cosas de su vida.
Laurel escribe sobre lo que le pasa: cómo se siente empezar en otra escuela, lo difícil que es forjar nuevas amistades, cómo es el primer amor o vivir con padres separados y, lo más importante, escribe sobre la muerte de May. De esta manera, comienza a relacionar las cosas que compartió con su hermana y sus experiencias personales, con las vidas y muertes de estos íconos. Cuando escriba la verdad sobre lo que le ocurrió, podrá aceptar la muerte de May y solo así logrará verla y recordarla como la persona que siempre fue: adorable, asombrosa e… imperfecta.
Crecer es doloroso. Muchas veces hay un mundo secreto que tarde o temprano hay que enfrentar. Y se enfrenta mejor con la verdad y con ayuda.
Gracias a Di por este regalo de cumpleaños tan hermoso.
Datos
Título: Cartas de amor a los muertos
Autora: Ava Dellaira
Editorial: V&R
N° de Páginas: 337
Opinión
Hace tiempo que tenía ganas de leer este libro. Varias veces tuve la oportunidad de comprarlo pero las dejé pasar por distintas razones. Primero lo quería, después leí reseñas malas y se me fueron las ganas, después volvieron... Para mi cumpleaños, la colorada de Soñaba pianos blancos, me lo regaló. Van a pasar cien años y voy a seguir agradeciéndoles.
Esta historia me intrigaba demasiado, para serles sincera. La sinopsis dice lo justo y lo necesario, así que tenía varias cosas por saber, por descubrir al empezar a leer. Un vez que leí la primera página, no me pude detener. Lo hubiera leído en un día si no hubiera tenido cosas que hacer y si mis ojos me lo hubieran permitido.
Laurel comienza a escribir cartas a personas famosas que ya han fallecido cuando su profesora de Literatura se lo pide a su clase como tarea, sin embargo, esa primera carta permanece oculta, no entrega la tarea pero no puede parar de escribirlas. Son varios los destinatarios de estas, entre ellos Kurt Cobain, Janis Joplin o Amy Winehouse, quienes fallecieron jóvenes como lo hizo su hermana May. A través de estas cartas, Laurel va soltando todo aquello a lo que se aferra inútilmente para recordar para siempre a su hermana.
El formato de esta historia es un formato epistolar, donde no encontramos divisiones por capítulos sino por cartas. Cada una de ellas, como se dijo anteriormente, tiene un remitente especial, un famoso que de alguna u otra manera se relaciona con algún hecho de su pasado o del presente. No son elecciones aleatorias ni mucho menos al azar. Cada uno de ellos tiene su razón de ser y eso es lo que más me fascinó. Se nota un gran trabajo de investigación y de organización de la historia por parte de la autora.
Este libro me emocionó muchísimo pero no al punto de llorar desde el principio sino que las lágrimas llegaron cerca del final. El hecho de seguir de cerca cada uno de los temores, los sentimientos y los movimientos de Laurel hizo que me sintiera aún más cercana a ella. En cada una de esas cartas, la narradora y protagonista, iba soltando un poco más e iba encontrándose a sí misma. Creo que el eje fundamental de esta historia no es la muerte de su hermana sino cómo esto afecta de tal forma a la protagonista que tiene que emprender una búsqueda sumamente complicada. No me refiero a una búsqueda de algo tangible. Me refiero a una búsqueda más exhaustiva. El buscar y encontrarse a sí mismo, descubrir quién querés ser. Es un libro que hubiera disfrutado leer hace varios años atrás. Estoy segura de que a mi yo de catorce o quince años le hubiera servido muchísimo más.
La historia me hizo acordar muchísimo a Las ventajas de ser un marginado de Stephen Chbosky no sólo por el formato, sino por el contenido. Comparten varios aspectos ambos protagonistas y ni hablar de quienes los rodean. Los amigos que hace Laurel a lo largo del año fueron los personajes que más adoré. Cada uno tiene algo que lo hace único y eso fue lo que me cautivó. A veces los autores dejan en segundo plano a estos personajes, haciéndolos comunes y desabridos; en cambio, Ava Dellaira se encargó de darles una evolución notoria a absolutamente todos los personajes. De todos, adoré a Tristán y a Sky. Con respecto a la protagonista, debo decir que al principio me resultaba un poco chocante. Sentía que ella siempre había vivido en una nube, que todo era lindo y bueno en su vida, que la muerte de May la había golpeado tanto por esa razón. Con el paso del tiempo, fui descubriendo que Laurel no era tan ingenua, que esa era su caparazón y que había mucho más detrás. A la par de ella, la vamos conociendo y sin dudas, nos vamos encariñando con su historia, y por qué no, sentirnos un poco identificados también.
Nirvana significa liberación del sufrimiento. Algunas personas dirían que esta liberación se alcanza con la muerte. Felicitaciones por haberte liberado. El resto de nosotros permanece aquí lidiando con las ausencias.
Pude ver en ella varios estados por los cuales todos pasamos cuando alguien que adoramos se nos va. Empezando por el sentimiento de culpa, ese sentimiento tan nefasto que nos corroe día a día; luego esa ira contra el mundo, contra todos y también la idealización. En un determinado punto, todos cometemos el gravísimo error de idealizar a esa persona, de creer que nadie será mejor y que nadie lo conoció tanto como lo hicimos nosotros. A veces con el tiempo abrimos los ojos, recordamos lo malo pero preferimos quedarnos con lo bueno. Y entonces podemos seguir, aunque sea, un poco. En Laurel pude notar a la perfección esa idealización hacia May. Para ella, su hermana era perfecta, era invencible, era todo lo que ella quería ser y más; siente culpa y siente bronca. La evolución de Laurel desde la primera carta hasta la última, es abismal.
Con respecto a las resoluciones, al final y a la trama, debo decir que sufrí bastante. Hubo varios giros que no esperaba y que incluso me sorprendieron así como también el final me dejó más que satisfecha.
Se lo recomiendo a todos los que pasaron por la pérdida de una persona importante, no para remover sentimientos y dolores del pasado, sino para ver de otra forma lo que pasó; a todos aquellos que aún no saben qué camino darle a su vida y están perdidos; a quienes necesitan un lindo recordatorio de que no siempre estamos tan solos como pensamos.
Calificación:
Historia: 4/5
Trama: 4/5
Narración: 4/5
Personajes principales: 4/5
Personajes secundarios: 3/5
Portada: 4/5
¿Reincidencia?: Tal vez.
